La prensa peruana y su cobertura COP-era
Cómo informar sobre Di Caprio se volvió más importante que las mismas negociaciones.
Tan magna introducción de las COP’s parece no haber sido entendida por la gran mayoría de periodistas peruanos o, al menos, de los medios con mayor cobertura.
La prensa peruana ha evidenciado sus enormes flaquezas durante la vigésima conferencia de las partes. Su exánime cobertura del evento mundial más importante que ha vivido el Perú en los últimos 193 años así lo demuestra. Sí, la COP 20 ha puesto los ojos de todo el mundo en el país de los Incas, por al menos dos semanas de intensas negociaciones climáticas
Ni siquiera el Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico —APEC—, se compara con una conferencia de las Partes. Este foro convocó a tan sólo 21 países y movilizó un poco más de 7000 personas al país andino. La COP20, por su parte, ha convocado a 194 partes y movilizado a más de 18000 personas entre delegados, observadores, periodistas especializados y políticos. Es, sin duda, el evento global más destacado de toda la historia republicana.
En las naciones dónde se desarrollan estos encuentros mundiales se esgrimen hitos. En Cancún COP 16, por ejemplo, el evento logró informar y articular mayores esfuerzos en el Estado y la sociedad civil que se tradujeron en acciones. El ex presidente mexicano, Felipe Calderón, que tuvo un destacado rol, ahora preside una comisión mundial de vital importancia para el orbe: La Nueva Economía Climática. Los jóvenes, a su vez, lograron vincularse e iniciar el complicado camino para consolidar una red ambiental con incidencia política y económica en el país Azteca.
Tan magna introducción de las COP’s parece no haber sido entendida por la gran mayoría de periodistas peruanos o, al menos, de los medios con mayor cobertura. Su desarraigo del tema es tal que sólo se limitan a comentar la participación de algún personaje mediático como Gastón Acurio y sus ceviches climáticos. O acciones sin relevancia como el problema que representa la COP para la suspensión de la final del Clausura. Así de jodido está el asunto por las oficinas de prensa y redacción.
La política climática es diametralmente franca. Los informes del IPCC —institución que recibió el Nobel de la Paz— son contundentes. Necesitamos actuar como humanidad, no como naciones, no en cinco años ni en diez, sino ahora. Estamos en un punto de inflexión que puede decidir nuestra supervivencia o no como especie. Todo ello, en consecuencia, necesita un proceso de negociaciones meticuloso y vinculante. Es el camino más eficiente que tenemos, al menos por ahora, para buscar solucionar un problema que nosotros generamos.
De las negociaciones la prensa peruana informa notas irrisorias. Más importante es, a su entender, la ausencia de Di Caprio y Emma Watson en el Venue, que el mismo consenso del borrador vinculante, principal objetivo de la COP Lima. La información en medios de mayor llegada sobre el Fondo Verde para el Clima es miserable. Si este es el escenario de la prensa escrita, es de imaginar cómo cubre el evento la televisiva. Quizá sólo TvPerú se libre, sin tener méritos destacados.
Este ambiente confabula y le da la connotación de circo a un evento que de lejos puede decidir el futuro del país y el mundo. Las negociaciones quedan reducidas, para el peruano promedio, a cotidianas y costosas veladas políticas. A mi entender, la prensa autónoma cubre el rol, con sus aún grandes limitaciones, de informar sin sesgos. Laureles para periodistas independientes y el “Fossil of the Day” a la prensa por correspondencia.